
1. Siéntete tan humano como humano es el medio que manejas.
2. Infórmate antes de ordenar y ordena como si tuvieses que rogar.
3. No exijas a los otros aquello que tú mismo no quisieras hacer.
4. Actúa con firmeza, pero comprendiendo al que ha de comprenderte.
5. Exalta los méritos ajenos y sé parco en exhibir los propios.
6. Nunca demandes lealtades que puedan lesionar honradas convicciones propias.
7. Compórtate con serenidad y huye de los arrebatos.
8. Pondera las consecuencias que colectivamente puedan suscitar tus decisiones.
9. Sé generosa, amplia y comunicativa hacia tus colaboradores.
10. Emplea la palabra serena, la actitud mesurada, la postura gentil, y la voluntad de ser útil, en un constante proceso de prodigalidad generosa, acorde con el anhelo de dar a la vida un sentido de honorable contenido humano.