Un Compromiso con Dios

Ayudará a cumplir el Requisito 3 del Paso de Doncella.

 

         Un pacto es un convenio serio entre dos o mas personas que deben tener la capacidad de cumplir sus obligaciones para conservar lo que han pactado.

         El matrimonio es un pacto entre un hombre y una mujer. Ellos prometen cumplir y ser fieles el uno al otro.

         A veces las naciones hacen pacto de amistad y prometen conservar la paz si no cumplen seriamente sus obligaciones se rompe la amistad y muchas veces tendrán que sufrir las consecuencias de una guerra.

         El pacto de la SAN también es un contrato serio y es sobre todo un contrato cristiano. Es un contrato que cada niña hace con el Señor. Las jovencitas que lo repitan deben ser jovencitas cristianas dispuestas a cumplirlo, porque si no son cristianas no pueden prometer fidelidad a Jesucristo y estarían diciendo una mentira al repetir sus palabras.

         El pacto de la SAN  es un contrato serio porque contiene una promesa de fidelidad a Cristo y a su iglesia.

         Solo los seguidores de Cristo reconocen la necesidad de obedecerle en todo. El pacto de la SAN es para las niñas serias, fieles y con un noble deseo de identificarse con Cristo en su obra en la tierra. Repitamos el pacto de la SAN:

         “Sabiendo que la gente que está en mi derredor anda en tinieblas, y deseando dar especial atención a los mandatos del Señor Jesús, prometo fidelidad a él, a su iglesia, y a sus actividades: me esforzaré, con la ayuda de Dios, para permanecer en Él por medio de la oración, adelantar en sabiduría por medio del estudio de la Biblia, adornar mi vida con buenas obras, practicar la mayordomía de mi tiempo, de mi dinero y de mis talentos, y cumplir todo lo que de mi demande la Gran Comisión”.

LEMA

"Levántate, resplandece, resplandece, porque ha venido tu luz" Isa. 60 :1

 

 

Ayudará a cumplir el Requisito 3 del Paso de Doncella.

 
 
Desde el año 1913 este versículo ha sido el lema de la SAN, las Niñas y Jovencitas en Acción y las Mensajeras del Rey. Miles de niñas lo han aprendido de memoria. Pero ¿cuantas de ellas  saben lo que significa estas palabras? Vamos a examinarlo y estudiarlo para entenderlo mejor y poder ponerlo en  práctica en nuestra vida.
 

¡LEVÁNTATE!

La palabra levántate es una orden a alguien que se encuentra en postración e inactividad. Cuando tú tienes que ir a la escuela, tu mamá viene a tu cuarto y te dice “levántate”. ¿Porqué tienes que hacer algo … tienes que ir a la escuela.

         Este mandato en este versículo es para las personas que se encuentran caídas en lo espiritual, que necesitan de alguien que les ayude a levantarse, para que les dé ánimo. ¿Qué es lo que impide a las personas levantarse de una postración? Es el pecado. La Biblia dice “Por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios” Romanos 3:23.

         La voz del Señor en los tiempos de Isaías es también una invitación para ti y para mi. “Levántate”, dice el Señor Jesús y él te ofrece su mano para que la tomes y te levantes.

¡PORQUE HA VENIDO TU LUZ!

La razón porque debes levantarte es “porque ha venido tu luz”. La luz que ha venido de Cristo. El es la luz del mundo. El dijo en Juan 8:12 “Yo soy la luz del mundo”. ¿Por qué dijo esto? Porque un luz sirve para quitar la oscuridad. La gente andaba en las tinieblas porque había pecado. Cristo vino al mundo y pagó el precio para liberar del pecado cuando murió en la cruz.

Entonces, cuando una persona pide perdón por sus pecados e invita a Cristo a morar en su corazón, él le quita toda oscuridad y llena su vida con la luz de su presencia. Es cuando como uno enciende la luz en un cuarto oscuro. La luz llena el cuarto y quita toda oscuridad. Así hace Cristo en nuestra vida cuando le recibimos como nuestro Salvador personal. Nos llena de la luz de su esencia y nos quita toda oscuridad.

Tú necesitas la luz de Cristo. La necesitas en tu diario vivir, para ver los peligros que a cada paso te pone el enemigo. Necesitas la luz para ver tus fallas. Pero lo más importare es que necesitas la luz para poder ver el camino que debes seguir en la vida.

Una vez que has recibido la luz de Jesús, debes compartirla con otros. Jesús dijo: “vosotros sois la luz del mundo… Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro padre que está en los cielos” (Mateo 5: 14ª,16). Entonces, el mandato de “levantarse” para ti porque ¡porque ha venido la luz de Cristo a tu corazón!

¡RESPLANDECE!

Hay dos mandatos en el versículo. Uno es “levántate” y el segundo es “resplandece”. No basta levantarte si no vas a hacer algo. ¡Debes resplandecer para Cristo! ¿Cómo lo haces? Aquí te damos algunas maneras de resplandecer.

Resplandece por medio de tu vida. Debes vivir de tal manera que otros deben ver a Cristo reflejado en ti. Significa cuidar tu vida espiritual por medio de la acción, la confesión de tus pecados al Señor, el estudio de la Biblia y la participación en los cultos de adoración. Quiere decir ser un buen ejemplo de fidelidad a Dios y a tu Iglesia. Debes actuar como una verdadera cristiana siguiendo el ejemplo de Cristo en tu diario vivir.

Resplandece por medio de la mayordomía. Debes administrar bien tu dinero, tu tiempo, tus dones. Significa llevar tu diezmo al templo y entregarlo al Señor y también dar ofrendas para la obra del Señor, especialmente para las misiones. Significa dar tu tiempo con alegría para servir al Señor y a los demás. Quiere decir utilizar los dones que el Señor te ha dado para servirle a él en la Iglesia, en tu hogar y en tu comunidad.

Resplandece por medio de las buenas obras. Significa ayudar a otros por amor de Cristo. ¿Cómo lo haces? Puedes visitar a un enfermo, animar al desanimado, consolar al afligido, ayudar al ciego, apoyar al sordo, alegrar al anciano, alimentar al pobre, amar al huérfano.

Resplandece por medio de tu testimonio. Tú puedes testificar con tu vida, por tu manera de vivir; pero también debes testificar por medio de tus palabras. Es decir, que debes hablar de Cristo. Debes decir a los inconversos lo que Cristo ha hecho en tu vida y explicarles cómo ellos también pueden conocer a Cristo como su salvador personal y el Señor de sus vidas.

EL MENSAJE ES PARA TI

¿Estás lista para obedecer los dos mandatos? Tal vez no quieras sacrificarte mucho para servir al Señor y te gustan las cosas fáciles. Pero escucha, para ti es este mensaje, “levántate y resplandece”. No es tiempo de estar dormida, la obra del Señor te necesita.  ¡Debes ponerte en pie para servir al Señor!¡ “El maestro está aquí y te llama!” (Juan 11:28).

Ayudará a cumplir el Requisito 2 del paso de Doncella

Ayudará a cumplir el Requisito 1 del Paso de Doncella y el 2 de Dama

 

MILAGROS

CITA BÍBLICA

 

4 Milagros de Resurrección de Muertos.

 

1

El hijo único de una viuda, mientras lo llevaban al cementerio.

Lucas 7:11-16

2

La hija de Jairo, el principal de la sinagoga.

Marcos 5:21-23

Lucas 8:40-56

3

Lázaro, que había estado muerto 4 días.

Juan 11:1-44

4

Su propio cuerpo, al tercer día de la sepultura.

Mateo 28:1-10

 

 

 

 

7 Milagros de Expulsión de Demonios

 

1

El hombre con espíritu inmundo.

Marcos 1:21-27

2

El endemoniado que era ciego y mudo.

Mateo 12:2223

Lucas 1:14

3

Los dos hombres poseídos de una legión excesivamente

Mateo 8:28-34

4

El hombre sordo poseído de un demonio.

Mateo 9:32-35

5

La hija de la mujer sirofenicia.

Marcos 7:24-30

Mateo 15:21-28

6

El muchacho lunático y el fracaso de los discípulos.

Lucas 9:37-42

Mateo 17:14-21

Marcos 9:14-24

7

El demonio mudo.

Marcos 9:14-26

 

 

 

 

16 Milagros de Sanidad

 

1

El hijo de un noble – de una fiebre

Juan 4:45-54

2

La suegra de Pedro – de una fiebre

Marcos 1:29-31

Mateo 8:14-17

Lucas 4:38-39

3

Un hombre cubierto de lepra

Marcos1:40-45

Mateo 8:1-4

Lucas 5:12-14

4

Un hombre llevado por cuatro de parálisis

Marcos 2:1-5

Mateo 9:1-2

Lucas 5:17-20

 

5

Un hombre paralítico que había estado

afligido por 38 años

Juan 5:1-11

6

El hombre de la mano seca

Marcos 3:1-5

Lucas 6:6-10

Mateo 12:9-13

7

El criado del centurión de parálisis

Mateo 8:5-13

Lucas 7:1-10

8

La mujer que había padecido flujo de sangre por 12 años

Marcos 5:25-34

Lucas 8:43-48

Mateo 9:20-22

9

La vista es devuelta a unos hombres

Mateo 9:27-30

10

La vista le es devuelta a un hombre que había nacido ciego.

Juan 9:1-41

11

Una mujer con una aflicción por 18 años

Lucas 13:10-17

12

Un hombre hidrópico

Lucas 14:1-6

13

Diez hombres de lepra

Lucas 17:11-19

14

La vista devuelve a un  mendigo

Lucas 18:35-45

15

La vista devuelta a Bartimeo

Marcos 10:46-52

16

La oreja de Malco el siervo del sumo sacerdote

Lucas 22:50-51

Juan 18:8-10